emmp-juan-14Esta es una experiencia inigualable…”, “sabía que sería lindo, grande, pero nunca pensé algo así…”, “me sorprendió el colorido, la diversidad, la profundidad de los planteamientos…”, “es un momento histórico, la voz del pueblo, sus luchas, y ahora con el apoyo del Papa, tendremos sin dudas un camino por recorrer pero mejor acompañados…”; estas fueron algunas expresiones que salieron del plenario al cierre de la apertura oficial y primera jornada del II Encuentro de Movimientos Populares que contó con la presencia de Evo Morales, presidente del Estado Plurinacional de Bolivia.

Santa Cruz, Bolivia. 7 de junio de 2015. Sesión de la tarde.

Desde la primera jornada, comienzan a aportarse sentidos y contenidos a los 10 puntos que conformarán el documento final del encuentro, que (luego de los debates en mesas de trabajo y en plenario) se entregará al Papa Francisco el día nueve como expresión y demanda de los 1500 representantes de 40 organizaciones que se dan cita aquí.

Ofrecemos un resumen de ideas centrales y contenidos correspondientes a la mayoría de estos puntos:

Acercamiento/coincidencias entre pueblo e iglesia o Papa.

Los pobres se han organizado contra la exclusión social que sufren día a día. La desigualdad y la degradación han generado organización para luchar por el acceso a la tierra, el techo y el trabajo que el mercado y su mano negra, ni los Estados resuelven.

La iglesia quiere unir sus manos en estos procesos y ayudarlos a que sus unidades productivas se fortalezcan. Los pobres, los campesinos y los originarios tienen la tarea de hacer política, por su parte, los movimientos populares proponemos un sistema alternativo descartando el consumismo, el despilfarro y el paradigma tecnocrático. No queremos explotar ni ser explotados. No queremos excluir ni ser excluidos. La iglesia quiere construir un modo de vida que pongan a la dignidad por encima de todo.

El problema de la Madre Tierra – ecología integral. Encíclica.

Hay una única y compleja crisis socio-ambiental, las líneas para su resolución requieren una aproximación integral para combatir la pobreza y para devolver la dignidad a los excluidos…”, aseguró el Cardenal Peter Turkson. Presidente del Consejo Pontificio de Justicia y Paz, designado por el Papa para acompañar el Encuentro.

Durante esta primera jornada se denunció que seis empresas trasnacionales controlan el monopolio de la producción de semillas transgénicas. El negocio es vender veneno, en consecuencia desarrollaron una semilla resistente al veneno.

Es preciso construir soberanía popular para garantizar soberanía alimentaria. Hay que recuperar el sistema campesino, nuestra forma de ser campesino.

Ni un campesino sin tierra, pero para trabajarla, no para envenenarla. Las mujeres son las principales víctimas del agronegocio. Expulsadas del trabajo en una actitud sexista y precarizadas.

Cuidar la casa común es nuestro gran reto. Rechazamos el colonialismo y el saqueo de recursos naturales, queremos reafirmar un destino universal de los bienes comenzando con los que vienen de la creación.

La nacionalización es el único camino de los pueblos libres para hacer justicia social…” dijo Evo Morales en el encuentro. Tenemos que decirle al imperialismo que su receta ha fracasado y combatir a quienes buscan desestabilizar procesos legítimos construidos por la vía democrática.

Más adelante enfatizaba en que intentan dividirnos para dominarnos políticamente. “Es tiempo de los pueblos del mundo, no de anarquías económico-financieras. Es el tiempo de los movimientos sociales. Debemos debatir donde está el origen de la pobreza y la desigualdad, y combatir esas instituciones”.

La lucha de los movimientos sociales por la libertad es responsabilidad de los pueblos y también de la iglesia.

Cultura popular e identidades originarias. Por la recuperación de una cultura de los pueblos.

Hacer que hacer valer nuestra cultura, recuperar la identidad y las tradiciones. Hay que atender las demandas y urgencias de los pueblos originarios, empobrecidos y expulsados de su tierra. El sistema capitalista genera diferencias entre nosotros mismos y nos despoja de nuestra identidad.

Los movimientos populares queremos la paz, que sus hijos no sean consumidos por la droga, ni que sus hijas sean sometidas a la trata. Para eso desarrollamos la organización comunitaria como mecanismo de defensa. El individualismo y la ambición es una herencia de las épocas neoliberales. Debemos dejar de lado la envidia, el egoísmo y la codicia entre nosotros.

Otros temas sobre los que se estarán pronunciando y construyendo consenso en estos días de trabajo se relacionan con el trabajo y conquistas sociales (la economía popular comunitaria y la economía social comunitaria), el capitalismo, y los desafíos de impulsar el proceso de cambio y la construcción de una nueva sociedad,

Techo – vivienda urbana, y ciencia y técnica a disposición del pueblo.